¿Cuántos profesionales son deudores de Enric? Maestro y pionero en tantos campos, es el muy merecido premio Laus de Honor 2017
A 10 días de la Nit Laus recordamos infinidad de momentos emocionantes, pero sin duda la entrega del premio Laus de Honor a Enric Aguilera fue uno de los más bonitos. En su discurso de aceptación escuchamos al Enric humilde y grande que tan bien conocen sus centenares de colegas de profesión, muchos de los cuales se consideran sus ‘discípulos’, aunque sea este un término que el propio Aguilera rechace con gesto entre púdico y vehemente.
Los siguientes fragmentos corresponde a la conversación con Enric que hemos publicado en el Laus magabook de este año. En ella disfrutamos de un diseñador cercano y apasionado, uno de los grandes del packaging, un profesional que disfruta compartiendo su forma de entender el diseño, su gran personalidad y, en definitiva, las razones por las cuales es el mejor merecedor del premio honorífico de 2017. No os perdáis la entrevista entera, un documento excepcional para entender la evolución que no solo el personaje sino todo el contexto de la comunicación gráfica han experimentado desde los años 1980.
Los inicios
«Antes de terminar de estudiar diseño ya había trabajado como grafista en algunos pequeños estudios: Molins Pujol, Ribas i Creus … En estos talleres aprendí el oficio, la parte más artesanal. Más tarde encontré trabajo en publicidad, en agencias como Slogan, Asterisco y multinacionales como Delvico o Tiempo BBDO. De aquella época recuerdo especialmente el ambiente de las agencias, la forma en que trabajaban en Delvico o en MMLB… También tengo un gran recuerdo de profesionales con Ramon Roda o Luis Casadevall. Fue una época dorada que no ha vuelto. Había unos proyectos fantásticos y unos creativos muy inquietos y con unas ganas enormes de hacer cosas nuevas».
De la publicidad al diseño
«En 1986 abrí mi propio estudio. Pasar de la publicidad al diseño gráfico no era lo más normal. En publicidad había aprendido a trabajar en equipo y obtener resultados inmediatos. Pensé que sería muy bueno aplicar todo esto al diseño, un campo más solitario y reposado. Esa mezcla me fue muy útil. «
Vida de estudio
«El estudio es mi espacio, el lugar donde estoy con la gente que me gusta. Trabajar para uno mismo es importante, te hace sentir con una libertad especial, es una suerte. Yo estoy encantado con el clima de estudio, porque en el fondo todos los que estamos, estamos a gusto con lo que hacemos».
Compromiso con la formación
«Un día Carlos Rolando dijo que todos los que trabajamos en esto tenemos la obligación de compartir nuestros conocimientos. Yo estoy muy de acuerdob(…) Diría que hoy en día las escuelas deben tener un compromiso mucho más profundo con la realidad profesional. Por ejemplo, me parece perfecto que el tercer año de diseño gráfico se estudie, por ejemplo, la identidad corporativa de un banco estadounidense, pero quizás no hay que tener metas tan grandes, tan alejadas. Nos deberíamos acercar mucho más al mundo real. Cuando los alumnos terminan de estudiar y entran en un estudio como el mío, navegan durante mucho tiempo… Y es que no conocen cómo funciona el entorno profesional. Por otro lado, creo que hay que fijarse en modelos que privilegian la vertiente conceptual, el pensamiento (…)».