Selección-proceso-solución: un buen concurso

“Nos ha costado tiempo, esfuerzo y mucha paciencia llegar a buen puerto, pero estamos orgullosos de este concurso. Primero, porque creemos que el resultado es extraordinario. Segundo, porque la defición del proceso y la elección [de la propuesta ganadora] las llevamos a cabo con el inestimable apoyo de ADG-FAD, gracias al cual pudimos hacer una selección razonada y con criterios profesionales.”
Estas palabras de Sergi Vicente, director de Barcelona Televisió, tienen un especial valor para ADG: recompensan un trabajo de años por difundir las buenas prácticas en la organización de concursos de diseño. Hablamos a fondo de ello hace unas semanas (en el post Concursos. Restringidos, remunerados y profesionales), y ahora la teoría se ejemplifica con el concurso recién acabado de la nueva identidad de Betevé.
Los últimos días se ha hablado con cierta efervescencia del resultado final. Incluso en medios generalistas que no suelen dedicar espacio a la comunicación y el diseño. En plataformas especializadas, la cobertura ha sido amplia y pertinente. Los artículos en Gràffica y en Brandemia son una buena introducción, por ejemplo. Pero nada como la propia página de Folch Studio, el equipo autor de la solución ganadora, para profundizar en los conceptos y significados, no solo del sistema de identidad gráfica sino de todo un programa que lo que busca es una nueva cosmovisión para la Barcelona de los próximos años. Recomendamos su lectura, que de algún modo introduce una concepción curatorial de la práctica del diseño.

Acabamos remarcando una vez más las virtudes del proceso que ha llevado a la resolución positiva de este concurso. Desde el punto de partida –un encargo, una problemática a resolver, unos objetivos a alcanzar–, ha sido un camino de meses de colaboración con el cliente. Hemos consolidado un enfoque que debe servir como modelo para futuros concursos: la articulación de unas condiciones objetivas, la voluntad de transparencia, la homologación de una estructura basada en la profesionalidad y el pacto. Estamos satisfechos: el caso de betevé ha significado un empuje y un factor de consolidación. Un avance en la aplicación de una buena praxis en los concursos de diseño. Si estáis interesados en tener y difundir el documento oficial de ADG-FAD sobre este tema, lo podéis solicitar escribiendo a adg@adg-fad.org.